Jermaine Bell, un niño de 7 años donó todos sus ahorros para visitar los parques de Disney en Orlando, a las víctimas del huracán Dorian en las Bahamas.
El pequeño ahorró por más de un año, y decidió invertir el dinero en comida y agua para los damnificados que se encontraban refugiados en Estados Unidos.
Debido a su noble gesto, Disney lo sorprendió el día de su cumpleaños con una visita inesperada. En ese mismo instante, le anunciaron entre risas y aplausos su regalo: un viaje a Disney World como invitado VIP junto a sus padres.