El diputado de la Asamblea Nacional, Ricardo Aponte, denunció que el nuevo esquema de distribución de gasolina, que comenzó el pasado lunes, no ha resuelto la escasez de combustible ni las largas colas en las estaciones de servicio, pues las personas deben pernoctar hasta 48 horas para surtir sus vehículos y en muchos casos pagar con dólares en las bombas subsidiadas.
El diputado por el estado Falcón denunció que las seis refinerías del país, las más importantes de América Latina, hoy están inoperativas como consecuencia de la destrucción de la industria petrolera por parte del régimen de Nicolás Maduro. Según la Encuesta Crisis Venezuela, publicada hoy cuando se cumple una semana de la instauración del nuevo esquema de venta de combustible, 62% de los venezolanos señala fallas en el suministro de gasolina y 37% reporta ausencia del suministro.
El representante de la Asamblea Nacional también se refirió a las manifestaciones que se han generado en el país producto de la escasez de gasolina. Apuntó que, en promedio, se generan 45 protestas al día por este motivo. “El régimen arremete con represión y contra los medios de comunicación que lo que han hecho es reflejar las irregularidades de lo que está ocurriendo día a día en estas bombas”, agregó.
El diputado Aponte puntualizó que existe una solución para resolver la escasez de gasolina en el país, pero que esta pasa necesariamente por la instalación de un Gobierno de Emergencia Nacional: “sin el régimen usurpador, inmediatamente comenzarán las importaciones de combustible mientras se recompone la industria petrolera y las refinerías comienzan a producir otra vez, para así tener autoabastecimiento”.